El chico llegó a las instalaciones, y tenía que admitir que no eran del todo feas, pero inclusive así, no se permitía a sí mismo el dejar a su tete viviendo allí.

Busco la recepción del lugar y pronto comenzó a ver a una gran masa de pacientes que estaban internados allí saliendo de sus habitaciones, la gran mayoría de ellos lucían infelices, y los demás estaban simplemente más que dopados.

Negó con su cabeza, sabiendo que taehyung podía terminar así en poco tiempo.

-Buenas tardes, y-yo quisiera tener información sobre un paciente.- Le habló a la recepcionista, que parecía estar muy ocupada como para prestarle un poco de atención. -Su nombre es Kim Taehyung, es nuevo aquí.- mordisqueó sus uñas.

-¿Y su nombre es?- La señora lo miró y encarnó una ceja mientras escribía algo en la computadora, a los pocos segundos la ficha de taehyung apareció en la pantalla.

El corazón de Jungkook dio un brinco.

-Jeon Jungkook.-

-Señor Jeon, lamento informarle que el paciente Kim no tiene permitidas sus visitas.-

El pecho del rubio se comprimió. aguantó las ganas que sentía de querer mandar todo a la mierda y entrar a la fuerza, pero ni siquiera sabía en que habitación se encontraba su niño.

-Bien, ¿al menos podría entregarle esto?- Puso el bolso que había traído consigo sobre el escritorio. -Es un poco de ropa.-

La recepcionista vaciló al momento de coger el bolso. escribió el apellido de Taehyung sobre una nota auto-adhesiva y la pegó en la mochila.

-No le hará falta, pero se la haré llegar.-

-Gracias.-